El nuevo trabajo de Lemmy y compańía ya está en la calle, y la verdad, lo escuché un poco de pasada para ver a qué sonaba... y tengo que decir que, pese a que no vamos a descubrir nada excepcional a estas alturas de Motörhead, he de reconocer que es un pedazo de disco. Da la sensación de que Lemmy ha rescatado las esencias más primigenias de Motörhead para hacer una disco cańero, con una producción encomiable, y ciertamente, los primeros 6 temas no te dan tregua. Es curioso el corte 7, "Brotherhood of man", un tema poco encajable en los esquemas de Motörhead de toda la vida... es como si hubieran cogido alguna influencia thrashmetalera y la hubieran plasmado a su manera... buen tema. A partir de aquí el disco pierde, bajo mi punto de vista, un poco, pero en el global me parece un discazo.