Yo de aeronáutica sé más bien poco, o nada. Pero durante mis años adolescentes me empapé mucho de la 1ª y 2ª guerra mundiales, y de forma colateral sobre los zeppelines. Simplificándolo mucho, los dirigibles tuvieron su época dorada a principios del siglo XX, y fue toda una revolución en el transporte de pasajeros. Pero varias cosas provocaron su declive en esta función; la primera, el enorme avance teconológico en los aeorplanos, mucho más efectivos y rápidos, y la segunda, la seguridad de los dirigibles, ya que al ser aeronaves propulsadas por una enorme cantidad de gas se requiería una estructura con unos parámetros de confiabilidad que por entonces se cuestionaron mucho desde la opinión pública. Los dirigibles se utilizaron mucho durante las dos guerras mundiales pero como elementos de transporte, y sobre todo como obstáculos a la aviación enemiga.
Hoy en día los dirigibles no son utilizados como transporte de pasajeros ni de mercancías, puesto que los aviones realizan esta labor con gran rapidez y eficacia, por no hablar de las enormes compañías y su peso en el comercio. Es en este sentido que me pronuncié ayer: sencillamente no lo veo; como trasnporte de pasajeros no lo veo viable por la falta de rapidez y las cuestiones de seguridad, y tampoco en el ámbito de las mercancías, en un mundo económico donde lo que prima es la rapidez.