Todas las opiniones son legítimas y respetables dentro de un marco contextual en le que se respire buena intención. A mí me parece fantástico lo que piensas Rebelman, pero bajo mi humilde punto de vista yo creo que estás en la tesitura de descubrir el viraje de timón de Maiden... como que todavía no lo acabas de aceptar. Para que me entiendas, en un ejemplo también cercano, es la misma o parecida tesitura de cuando Víctor García "fue marchado" de Avalanch; el estilo de los asturianos era claramente un power metal muy marcado, y de repente, con reminiscencias, con Ramón Lage y Dany León como nuevas incorporaciones Avalanch nos fueron desgranando discos que poco tenían que ver con sus inicios. Y fueron no pocos fans los que se sintieron desencantados con esa dirección, y no pocos los que creímos que lo que seguían haciendo era fabuloso.
Con Maiden pasa algo muy parecido; el retorno de Bruce y Adrian a la banda trajo aire fresco a la banda; un regusto por lo grabado en el pasado, pero también la oportunidad, por tener de vuelta a compositores tan versátiles, de hacer cosas distintas, que cristalizaron sobre todo en "A matter..." y "The Final Frontier". Han sido, en estos años, también no pocos los fans de Maiden que no han asumido el cambio de orientación en su música, pero somos muchos los que respetamos la voluntad de la banda, y desde luego disfrutamos con sus nuevas obras.
Evidentemente no es comparable un directo de Genesis ni de Rush con uno de Maiden... sobre todo porque la leyenda de Maiden se ha fraguado en directos explosivos y contundentes, no en puestas en escena complicadas y envolventes... aunque de esto ha habido siempre en muchos momentos: "To tame a land", "The rime of the ancient mariner", "Phamton of the opera", "Hallowed be thy name", "Stranger in a strange land"... La cuestión es que Harris ha decidido que el sonido en estudio y en directo sea de una manera... y eso no indica necesariamente que Maiden hayan dejado de componer para tocar.